Durante los primeros dos meses de 2020, ventas minoristas y de servicios de alimentos aumentó hasta 6.5% año tras año. En medio de la crisis económica provocada por el coronavirus, con el cierre masivo de centros comerciales y tiendas en todo el país, solo las empresas esenciales como las tiendas de comestibles permanecen abiertas. Lo que nos hace preguntarnos cuál será el futuro de las compras de comestibles después del coronavirus.
A medida que los compradores cambian al modo de supervivencia, el impacto potencial del coronavirus en la economía minorista sigue siendo insondable.
Los expertos sugieren que incluso cuando la vida cotidiana vuelve a la normalidad, es posible que tengamos que seguir usando máscaras y observar el distanciamiento social hasta que se desarrolle, pruebe y despliegue una vacuna.
Aquí hay un vistazo de lo que se avecina.
El futuro es ahora
El auge del comercio electrónico ha obligado a los minoristas a adaptarse y adaptarse a las nuevas tendencias de consumo. Las empresas que han aceptado este desafío están prosperando, mientras que aquellas que no tienen la visión (o los recursos) para reinventarse a sí mismas con el tiempo se han quedado atrás y, en muchos casos, se han visto obligadas a cerrar la tienda o declararse en quiebra.
Este proceso evolutivo se puso en marcha mucho antes de que esta pandemia se convirtiera en alimento cotidiano, pero la crisis provocada por la pandemia ha acelerado la línea de tiempo exponencialmente.
Las tiendas de comestibles y los minoristas que habían comenzado a probar las opciones de entrega y recogida en la acera tendrán que ajustar su modelo de negocio y logística para racionalizar esos servicios de manera permanente y sostenible.
Comportamiento del Consumidor
Imagen: CNN
Los hábitos de las personas, especialmente cuando se trata de comprar y cocinar, se han visto afectados por el brote de coronavirus.
Las tiendas de comestibles se enfrentan a la escasez de suministros y los restaurantes están cerrando, y las restricciones para salir al exterior limitan la exposición y cambian los hábitos de consumo.
Uno de los cambios más importantes que vemos es que cada vez más consumidores utilizan los servicios para la recogida en la acera o la entrega a domicilio. Estos compradores por primera vez tienen una alta probabilidad de convertirse a esta forma de comprar de forma permanente a medida que se acostumbran y muchos de ellos están intentando comprar en línea por primera vez.
En 2019, Coresight Research informó que en una encuesta a 2,500 compradores de comestibles, el 41% informó que realizaba una "pequeña cantidad" de compras en línea, mientras que el 12% dijo que compraba "la mayoría o casi" en línea. - Forbes
A partir de una encuesta realizada en marzo de 2020, el 41% de los compradores en línea eran principiantes.
Es probable que la cuarentena les dé a las personas suficiente tiempo para crear nuevos hábitos y adoptar las compras en línea como parte de su rutina.
Previsiones
Aquí hay seis pronósticos para ayudarlo a comprender mejor la dirección en la que creemos que se dirigirán las tendencias de los consumidores durante y después de la pandemia:
1. La gente continuará abasteciéndose
Antes de la cuarentena, algunas personas visitaban supermercados dos veces por semana o más. La gente ha estado aprendiendo a abastecerse. Esta es una habilidad que probablemente seguirá presente, incluso después de que termine la pandemia.
2. Hola, compras eficientes
Los días de deambular sin rumbo por los pasillos de los supermercados han terminado. No vamos al supermercado tan a menudo como solíamos hacerlo, y cuando lo hacemos, existe un distanciamiento social. Los consumidores están aprendiendo cómo organizarse mejor y, lo que es más importante, atenerse a su lista de compras.
3. ¡Una larga vida útil es imprescindible!
Las ventas de productos frescos continúan en aumento. Sin embargo, es importante saber que las personas están considerando frutas y verduras que duran más.
El aumento del consumo de productos frescos el mes pasado se debió principalmente a la demanda de naranjas y limones que duran más. ¡Las patatas también están de moda! Durante semanas, han sido los principales líderes de crecimiento de productos frescos según un informe de la industria.
Los productos congelados y enlatados están regresando. A pesar de que su popularidad disminuyó en los últimos años, hoy en día la gente recuerda lo útiles que son estas presentaciones.
4. Entregas y recogidas
Antes de la pandemia, las entregas representaban 3 por ciento de todas las ventas de comestibles.
Las restricciones y los cierres de refugios en el lugar aumentaron esta métrica, pero muchos minoristas aún no están preparados logísticamente para implementar ampliamente este servicio.
Gestionar y apoyar la entrega a domicilio y la recogida en la acera no es rentable para muchas tiendas de comestibles. Un compromiso más realista, para muchos, es el modelo de compra en línea, recogida en la tienda (BOPIS), que describiremos más adelante.
5. Los pagos móviles y los pagos en línea llegaron para quedarse
Estas alternativas de pago están asumiendo el control en tiempos de pandemia. Otros sistemas de pago, como Apple Watches o teléfonos inteligentes para pagar en la caja, serán cada vez más populares como una alternativa a las transacciones en efectivo llenas de gérmenes y las máquinas de tarjetas de crédito.
6. Comestibles locales
Con la demanda masiva en las tiendas de comestibles más grandes, como Walmart, los consumidores han experimentado lugares abarrotados, largas colas y falta de artículos. Eventualmente, los clientes recurrirán a su supermercado local para obtener lo que necesitan.
Lo que hemos explicado hasta ahora es solo la punta del iceberg, y hay algunas cosas a tener en cuenta:
Según la Forbes, los líderes en acciones en el mercado estadounidense serán:
- Tiendas de alimentos y bebidas con el 12.5% del total de la nación ($ 6.2 billones en ventas minoristas y de servicios de alimentos el año pasado);
- Compras electrónicas (11%);
- Tiendas de mercancía general (9.2%), excluyendo grandes almacenes; y
- En menor medida, las tiendas de salud y cuidado personal con 5.7% de participación en el mercado minorista.
¿Cómo pueden prepararse las tiendas de comestibles?
En nuestra vida cotidiana, tal aumento en la demanda significaría buenas noticias para cualquier minorista. Pero los tiempos que vivimos han llevado a la industria de comestibles casi al punto de ruptura.
Cuidar de los empleados
Debido a la emergencia, los grandes jugadores han anunciado tienen planes de contratar a casi medio millón de trabajadores: Walmart suma 150,000, Amazon 100,000, Dollar General y CVS 50,000.
Los trabajadores de supermercados necesitan un mejor tratamiento.
Las marcas se están dando cuenta de que sus empleados son lo que une a los clientes con la marca y no solo los precios.
Muchos minoristas están ofreciendo incentivos a sus empleados y aumentos salariales temporales.
Lo más probable es que el pago por hora se ajuste a largo plazo y las ganancias puedan verse afectadas.
Automatización e Innovación
La historia nos ha enseñado que la innovación prospera en tiempos de crisis. Las empresas encontrarán nuevas formas de vender sus productos a los consumidores que están obligados a quedarse en casa.
Los minoristas que dudaron en probar el comercio electrónico finalmente están recurriendo a él, pensando en formas de proporcionar la misma experiencia a sus clientes.
La automatización y la innovación tendrán una expansión mucho más rápida. De acuerdo a diferentes escenarios de crecimiento, muchos minoristas y consumidores preferirán el modelo BOPIS.
Las tiendas ahorrarán tiempo y dinero en logística de entrega y los clientes parecen estar más contentos ya que han ganado más control.
Potencialmente, esto podría variar desde el uso de la entrega de drones hasta los procesos de almacenamiento automatizados.
Pensamientos Finales
Los minoristas de comestibles deben estar preparados para el auge de las ventas en línea después de que termine la pandemia. Tener en cuenta los nuevos hábitos de compra y ofrecer una gama de opciones para atender mejor a los clientes será el factor que haga o deshaga una tienda en esta crisis.
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